Esta normativa es de especial importancia para el ahorro de energía anual que deberán cumplir los países europeos para completar la transición energética y conseguir la descarbonización para 2050.
España cuenta con 2 años para transponer dicha directiva a su ordenamiento jurídico.
Destaca el papel ejemplar de las administraciones públicas para aumentar la eficiencia energética de sus instalaciones.
Las auditorías energéticas y certificados de ahorro energético, serán elementos clave para confirmar que se están consiguiendo los ahorros buscados.
También se esperan futuras modificaciones que adapten el RITE y el Código Técnico de la Edificación a estos nuevos objetivos.
Nuestra confederación nacional CONAIF, nos envía un documento con las novedades y cambios más importantes de esta revisión.